3ª Sesión teórica ¿Qué es la cultura corporativa? (6/10)

Antes hablábamos de cómo para comunicar y trasmitir la identidad corporativa de una empresa, debíamos de hacer uso de lo que llamamos la cultura corporativa. Hablar de cultura puede resultar algo genérico e incuso poco conciso, pues se trata de un término muy abierto y ambiguo que se puede aplicar a muchos contextos e interpretaciones. Según la RAE, se puede entender como :

- Conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio crítico.

- Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.

Para aplicar este concepto al ámbito empresarial y comunicativo hará falta profundizar mucho más, y por ello, aparte de los apuntes tomados en clase, he querido buscar información alternativa para complementar la percepción que tenía. En mi búsqueda, me he topado con Ernesto Yturralde, un consultor, conferencista e investigador especializado en planificación estratégica e implementación con 30 años de experiencia. Aparte de tener reflexiones sobre la cultura corporativa muy interesantes, también aporta una definición muy en la línea de lo que hemos estudiado hasta ahora.

"La Cultura Corporativa (o también denominada Cultura Organizacional), es el conjunto de valores, costumbres, hábitos y creencias, ritos, rituales, símbolos, modelos, normas y patrones existentes en una organización".

Podriamos decir que es un sistema de significados que son compartidos (unos más intangibles e imperceptibles que otros) por gran parte de la plantilla de una organización. La cultura corporativa se convierte en la forma que tiene la organización de hacer las cosas, como resultado de la interrelación y la mezcla de diferentes elementos en el comportamiento de los empleados. De esta forma, cada organización funcionará de una manera diferente según la cultura corporativa que se fomente entre sus empleados y eso se reflejará en el trabajo, en la imagen corporativa y en su reputación.

Pero, ¿cómo conseguir coordinar una serie de hábitos, creencias o valores en todos los trabajadores? ¿cómo gestionar y controlar estos hábitos, creencias o valores que suelen ser cosas tan únicas? De eso se encarga el DIRCOM. Hay diferentes factores que entran en esta cultura corporativa: creencias y valores de la empresa (que sean compartidos e impregnados), las normas de comportamiento y políticas escritas (lo ideal sería que no sean impuestas, sino adoptadas y asumidas por los mismos trabajadores como parte de sí mismos), la motivación que se promueva verticalmente y las redes internas existentes en la organización.

Esto se puede traducir, tal como hablamos en clase, en:

-Calidad laboral (salarios, grado de desarrollo, motivación y reconocimiento, conciliación de la vida personal con la vida laboral, etc...)

-Marca empleado (buena imagen para la sociedad, atracción de talento, recomendación...)

- Reputación interna (una ética consolidada, igualdad y diversidad, buen lugar para el liderazgo, orgullo de pertenencia, etc...)

Esto es todo lo que un trabajador puede desear, y con ello, el rendimiento será mucho mayor y el día a dia mucho más inspirador para todos. Como decíamos en el post anterior con Simon Sinek, ¿que puede haber mejor que conseguir que venir a trabajar sea algo inspirador?

Como vemos, para que los empleados hablen bien de tu empresa y se sientan parte de tu proyecto, la propia organización debe saber y ser conscinte de cómo tratarlos y qué ambiente laboral crear para generar un comportamiento positivo y motivado en sus trabajadores (no confundir el clima organizacional con la cultura organizacional). No es algo que se deba dejar al azar, ni siquiera se pueden crear culturas desde 0; Como dice Ernesto Yturralde, todas las estructuras conformadas por humanos tienen su cultura; por lo tanto, las culturas no se crean, existen. Lo que hay que hacer es ejercer una gestión y un fomento sobre ella, para moldearlas positivamente (o negativamente) según nuestras acciones.

En conclusión, podemos decir que por mucha visión y liderazgo que tenga la empresa, si no es compatible con la cultura corporativa, ninguna estrategia podrá ser 100% eficaz, pues no tendrá el apoyo real de sus trabajadores y se irá a contracorriente de sus creencias y valores. Por eso primero hay que hacer un ejercicio de "Intrategia" para coordinar y tener el apoyo de los empleados de tu organización.

La plantilla siempre es el motor de nuestra empresa y por eso es tan importante la cultura corporativa para la dirección de comunicación.

Bendita Comunicación.